Una dieta sana es aquella que va a proporcionarnos unos niveles óptimos de nutrientes para el mantenimiento y regeneración del organismo, y unos niveles bajos de alimentos perjudiciales para la salud. Tenemos entonces que tener en cuenta que una mujer adulta generalmente consume entre 1500 y 2300 calorías, los hombres entre 1800 y 2500 calorías. Todo lo que comamos de más y no necesitemos utilizar por nuestra actividad diaria quedará en nuestro organismo como reserva energética generalmente en forma de grasa.
Si queremos conocer el número de calorías por cada gramo de nutriente que ingerimos, el cálculo es fácil de hacer. Por cada gramo de carbohidrato que tenga un alimento aportaremos a nuestro organismo aproximadamente 4 Kcal, por gramo de proteína 4 Kcal y por gramo de grasa 9 Kcal. Si sumamos que proporción de cada nutriente tiene el alimento que ingerimos y multiplicamos por las kilocalorías equivalentes de cada uno de ellos tendremos como resultado el total de calorías de ese alimento.
Una dieta sana tiene que ser una dieta equilibrada. La correcta proporción de los nutrientes que deberíamos tomar cada día para seguir una dieta equilibrada sería:
- Entre un 10% y un 15% de los nutrientes deben ser proteínas.
- Entre un 25% y un 30% deben ser grasas.
- Entre el 55% y el 65% deben ser hidratos de carbono.
Las vitaminas, los minerales, la fibra y el agua son nutrientes que no aportan energía, pero que también son muy necesarios para el buen funcionamiento del organismo.
Para seguir una dieta equilibrada, el desayuno debe ser la comida que mayor cantidad de calorías contenga. La cena sin embargo debería ser la comida más ligera.
También la genética de cada persona va a tener una influencia grande en la capacidad que cada uno de nosotros tenemos de metabolizar los diferentes nutrientes de la dieta. A la ciencia que estudia como el componente genético de cada persona afecta a la metabolización de los nutrientes se llama nutrigenética.
Datos interesantes
A veces existe una gran confusión entre el término dieta equilibrada y dieta saludable. Una dieta equilibrada debería ser aquella que cubra todas las necesidades nutricionales de una persona para que su organismo funcione correctamente. Sin embargo, una dieta equilibrada podría no ser saludable.
Una dieta saludable se consigue al realizar una dieta variada que incluya alimentos de diferentes grupos: cereales, frutas, hortalizas, aceites, lácteos, pescados, huevos, carne etc. En cualquier caso es importante también incluir ejercicio físico para que la combinación entre estos dos factores, dieta saludable-ejercicio físico, realmente beneficie a nuestro organismo.
Un poco de historia
Los alimentos se han utilizado en el trascurso de los siglos incluso con carácter de medicina. Un antiguo tratado oriental describe el tratamiento de enfermedades en los ojos con extracto de hígado, cuando todavía no se conocía las propiedades curativas de la vitamina A.
La importancia de una dieta sana para cuidar la salud es algo conocido desde la antigüedad. Sirva como ejemplo la famosa frase de Hipócrates "Que tu alimento sea tu medicina”.
Para recordar
La dieta sana es aquella que va a aportar los nutrientes que una persona necesita para mantener las funciones de su organismo.
Una dieta sana debe contener proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
La fuente principal de vitaminas y minerales son las verduras y las frutas.
Las proteínas pueden adquirirse a través del consumo de carne y pescado pero alimentos como las legumbres, semillas, frutos secos, frutas y cereales también contienen proteínas.
No hay dietas generalizadas para todo el mundo. Cada persona requiere una diversidad específica de nutrientes en función a muchos factores entre los que se incluye la actividad física que realice pero también como su genética hace que metabolice esos nutrientes.