Datos interesantes
A veces existe una gran confusión entre el término dieta equilibrada y dieta saludable. Una dieta equilibrada debería ser aquella que cubra todas las necesidades nutricionales de una persona para que su organismo funcione correctamente. Sin embargo, una dieta equilibrada podría no ser saludable.
Una dieta saludable se consigue al realizar una dieta variada que incluya alimentos de diferentes grupos: cereales, frutas, hortalizas, aceites, lácteos, pescados, huevos, carne etc. En cualquier caso es importante también incluir ejercicio físico para que la combinación entre estos dos factores, dieta saludable-ejercicio físico, realmente beneficie a nuestro organismo.
Un poco de historia
Los alimentos se han utilizado en el trascurso de los siglos incluso con carácter de medicina. Un antiguo tratado oriental describe el tratamiento de enfermedades en los ojos con extracto de hígado, cuando todavía no se conocía las propiedades curativas de la vitamina A.
La importancia de una dieta sana para cuidar la salud es algo conocido desde la antigüedad. Sirva como ejemplo la famosa frase de Hipócrates "Que tu alimento sea tu medicina”.
Para recordar
La dieta sana es aquella que va a aportar los nutrientes que una persona necesita para mantener las funciones de su organismo.
Una dieta sana debe contener proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
La fuente principal de vitaminas y minerales son las verduras y las frutas.
Las proteínas pueden adquirirse a través del consumo de carne y pescado pero alimentos como las legumbres, semillas, frutos secos, frutas y cereales también contienen proteínas.
No hay dietas generalizadas para todo el mundo. Cada persona requiere una diversidad específica de nutrientes en función a muchos factores entre los que se incluye la actividad física que realice pero también como su genética hace que metabolice esos nutrientes.