El número 24 de la revista Actas de Coordinación Socio-sanitaria se presenta en forma de monográfico centrado en la Atención Temprana, un conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, que tiene ya una larga trayectoria en España, y que presenta algunas necesidades y mejoras, a las que nuestra revista ha querido aportar su grano de arena. Pero más allá del contenido de este número, encontramos novedad que nos hace muy felices, ya que hemos hecho accesible el contenido de la revista en nueva sección en Lectura Fácil. 

La Lectura Fácil es una iniciativa surgida de la International Federation of Library Associations (IFLA para proporcionar accesibilidad cognitiva y eliminar las barreras de participación social en las personas con discapacidad intelectual. En otras palabras, la Lectura Fácil es una forma de adaptar la información escrita para que sea leída y comprendida por el mayor número de personas.

Como ocurre con cualquier otra medida de accesibilidad y diseño universal, los documentos en Lectura Fácil, aunque se dirigen a las personas con discapacidad intelectual, pueden servir para otras muchas personas, por ejemplo inmigrantes que conocen de manera básica nuestro idioma, personas con escolarización deficiente, personas mayores…en definitiva, cualquiera que tenga dificultades para comprender un texto escrito. Los documentos en Lectura Fácil se centran en dar la información importante, por lo que exigen menos tiempo y menos recursos intelectuales para comprender la información. Para ello, eliminan todo tipo de tecnicismos y sintaxis complejas, reduciendo la información en frases cortas donde cada una transmite una idea clara y simple.

Esta herramienta se ve necesaria en la sociedad por diversos motivos, entre otros, cabe resaltar que el acceso a la lectura y a la información es un derecho y una necesidad social, ya que se calcula que más del 30% de la población tiene dificultades lectoras. 

La eficacia de la Lectura Fácil como medida de accesibilidad dirigida principalmente a las personas con discapacidad intelectual se ve reflejada en la adquisición de competencias lecto-escritas además del acceso a la cultura, y en general a la participación social. El potencial lo adquiere cuando se combina con las Tecnologías de la Información y Comunicación, ya que facilita el uso de dichas tecnologías mejorando la calidad de vida de aquellas personas que hacen uso de ellas. 

Para que un texto esté “oficialmente” en lectura fácil tiene que seguir unas directrices internacionales en cuanto al lenguaje, contenido y forma; teniendo en cuenta que no es un resumen y que debe de incluir un proceso de evaluación por parte de la población a la que se dirige.

En nuestra revista, a partir de este número, se recogen en Lectura Fácil todos los artículos publicados. Para conseguir desarrollar esta sección, hemos tenido en cuenta las directrices internacionales: letra más visible, frases cortas, sinónimos simples y sin construcciones gramaticales complejas. 

Con esta gran herramienta que es la Lectura Fácil, esperamos llegar a hacer la revista lo más divulgativa posible con el fin de llevar el conocimiento científico a aquellas personas que tengan dificultades para comprender un texto escrito.

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Puede acceder aquí a la versión en Lectura Fácil del número 24 de la revista.