El Servicio Andaluz de Salud, a través del servicio Salud Responde, utiliza la tecnología para cuidar de los ciudadanos más vulnerables ante el exceso de calor.  Concretamente utiliza el sistema de telefonía inteligente para realizar el seguimiento de los pacientes vulnerables, dentro del Plan Andaluz de los efectos de temperaturas excesivas sobre la salud para 2024.

A través de este plan, en función de la previsión de temperaturas máximas facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Salud Responde pone en marcha campañas de información a los pacientes de riesgo identificados por Atención Primaria. Estos pacientes están incluidos, en cada una de las provincias andaluzas, dentro del plan de seguimiento telefónico.

Existen diferentes niveles de alerta: nivel 0 o ausencia de riesgo (color verde), nivel 1 o bajo riesgo (amarillo), nivel 2 o riesgo medio (naranja), y nivel 3 o alto riesgo (rojo). Dependiendo del nivel de alerta en cada provincia, Salud Responde activa la campaña de seguimiento de los pacientes, que recibirán un primer contacto a través del sistema inteligente de llamadas (IVR).

El objetivo principal del plan es minimizar los efectos del calor sobre la salud de la población, con especial atención a los colectivos más vulnerables, trabajando de forma coordinada entre las instituciones implicadas y centrando los esfuerzos preventivos en las poblaciones de riesgo. Entre los mencionados colectivos vulnerables se encuentran las personas mayores de 65 años, los enfermos crónicos y las personas que toman un medicamento que pueda influir en la adaptación del organismo al calor, como psicótropos, antidepresivos, hipotensores, anticolinérgicos y diuréticos.

Del mismo modo, también se presta una consideración singular a los ámbitos domiciliarios y a las residencias de personas mayores, así como a las áreas con alta marginalidad.

Sistema de seguimiento 

El sistema establece un primer contacto con los usuarios lo más rápido posible. Para ello el sistema les consultará si han notado una mayor debilidad o cansancio, piel roja o dolorida, espasmos musculares o calambres, dolor palpitante de cabeza, náuseas o mareos. Si no presentan esta sintomatología, el sistema le trasladará las principales recomendaciones para afrontar las altas temperaturas. Recomendaciones como evitar la exposición directa al sol en las horas centrales del día, y en caso de salir, hacerlo con la máxima protección. También es recomendable usar ropa ligera, colores claros, sombrero, gafas de sol, crema solar, mantener un buen nivel de hidratación o tomar frutas y verduras.

Si las personas hubieran sufrido algunos de los síntomas indicados, el sistema, de forma automática, las trasladará a un segundo nivel para conocer si el paciente presenta un problema de agotamiento por calor o padece quemaduras solares. En ese caso el propio sistema conecta al paciente con el personal de enfermería de Salud Responde, que tratará cada caso para determinar su gravedad y la respuesta más adecuada.