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Foto de una mujer en la piscina que salta hacia arriba con los brazos abiertos

Para soportar el calor, un buen chapuzón en la piscina es la mejor opción para refrescarse. Ahora bien, desde el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha (Coficam) lanzan algunos consejos para disfrutar al máximo con seguridad

  • Cuidado con el borde de la piscina. Es habitual presenciar escenas de juegos alrededor de la piscina que pueden dar lugar a resbalones y torceduras de tobillo a causa del agua evacuada, lo que puede acabar en una visita al hospital y arruinando el verano de los más pequeños. 
  • Sumergirse con precaución. Los niños y los jóvenes suelen ser los accidentados más frecuentes con heridas y lesiones producidas por saltos imprudentes. “Cada verano en nuestro país se producen casos de lesiones medulares por irresponsabilidades de los bañistas y en la mayoría de las ocasiones podrían haberse evitado tomando las medidas oportunas y siendo conscientes del peligro”, afirman desde el Colegio. Las consecuencias de una mala zambullida pueden ir desde una fractura más o menos leve hasta una lesión medular o un ahogamiento si se pierde la consciencia.
  • Cambiar de postura si tomas el sol. Tumbarse en la hierba con la toalla al sol es una de las costumbres más frecuentes durante la visita a la piscina, sin embargo, conviene cambiar de postura cada poco tiempo o incluso hacer algo de ejercicio estirando los músculos y dando paseos con el fin desentumecer el cuerpo. Se aconseja limitar la exposición al sol entre las 12:00 y las 18:00 horas, y si se hace que sea brevemente, y hacer un buen uso de los protectores solares.
  • Calzado adecuado. Normalmente no se suele prestar mucha atención al calzado en la época estival, pero no conviene olvidarse de ello y asegurarse de llevar unas sandalias cómodas. Caminar con unas chanclas no adecuadas puede acarrear diferentes lesiones musculares en el pie, rodilla o espalda.
  • Educación e información. Aunque a veces pueda resultar evidente o redundante “sigue siendo necesario mandar un mensaje de prevención a los más jóvenes, ya sea desde las instituciones públicas o privadas, que refuercen esa idea de que no todo vale en la piscina”, concluyen desde Coficam. 

Por último, en caso de presenciar una caída o un salto peligroso hay que avisar inmediatamente a los servicios de emergencia y solo en caso de tener los conocimientos necesarios socorrer a la persona herida. “Si es necesario manipular a la víctima, es muy importante inmovilizar el cuello y evitar movimientos de la columna”, concluyen desde el Colegio.

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