La Fundación Caser para la Dependencia ha celebrado la conferencia que, bajo el título Nuevos avances para tratar de detener el Alzheimer, ha impartido el prestigioso doctor e investigador:
Norman Relkin
Se celebró el día 10 de abril a las 18:30 h. en Real Academia Nacional de Medicina.
C/ Arrieta 12, Madrid.
Resultado: 80 asistentes.
Norman Relkin presenta la investigación llevada a cabo con el fármaco IGIV (Inmunoglobulina Intravenosa)
Fundación Caser para la Dependencia ha puesto en marcha su II Ciclo de conferencias para promover la sensibilización social en materia de Dependencia. La primera de ellas bajo el título Nuevos avances para tratar de detener el Alzheimer, fue impartida por el prestigioso doctor e investigador norteamericano, Norman Relkin, en la Real Academia Nacional de Medicina. Relkin afirmó que el fármaco denominado IGIV (Inmunoglobulina Intravenosa), tras realizar ensayos clínicos en humanos, ha demostrado que puede detener el deterioro cognitivo provocado por el Alzheimer durante tres años.
Actualmente, estos avances se encuentran en la última fase de investigación y podrían comenzar a comercializarse en apenas una década.
Uno de los méritos de este tratamiento frente a los ya existentes, es que, mientras que estos son efectivos para reducir los síntomas, pero no cambian el curso de la enfermedad ni inciden sobre la esperanza de vida, el IGIV sí detiene el deterioro cognitivo. Incluso destacó que, en los ensayos llevados a cabo, se ha conseguido que los pacientes aprendan cosas nuevas, lo cual es extraordinariamente poco frecuente en este tipo de personas.
En el trascurso de la conferencia, el investigador norteamericano hizo un repaso de los avances conseguidos en la lucha contra esta enfermedad que definió “como una de las más caras en cuanto a tratamiento”. Destacó los importantes logros alcanzados desde que 1906 se diagnosticó el primer caso. Entre ellos, mencionó el hecho de que ahora, el Alzheimer se puede diagnosticar en vida del paciente gracias a los PETs, cosa que hasta la década del 2000 no ocurría. Asimismo, señaló que “el 95% de los fármacos e intentos de curar el Alzheimer han fracasado porque no se entendía la naturaleza de la enfermedad”.
Asimismo, Relkin insistió que, además de los tratamientos, es fundamental que los pacientes mantengan una vida sana, realicen ejercicio con regularidad, e intensifican la actividad intelectual y social.