Desde Estados Unidos llega la buena noticia. La Administración estadounidense de Alimentos y Medicamentos (FDA), ha aprobado el uso de donanemab (350 mg/20ml, inyección mensual de administración intravenosa), de Eli Lilly and Company, para el tratamiento de adultos en fases tempranas sintomáticas de la enfermedad de Alzheimer. Medicación indicada para personas con deterioro cognitivo leve, así como aquellas en etapa de demencia leve causada por enfermedad de Alzheimer con confirmación de patología amiloide.
Donanemab es la primera y única terapia, hasta ahora, dirigida a la placa amiloide con evidencia científica que respalda la suspensión del tratamiento cuando se eliminan dichas placas, lo cual puede limitar la duración del tratamiento.
El amiloide es una proteína que se produce de forma natural y que en ocasiones puede depositarse en forma de placas de amiloide. La acumulación excesiva de estas placas de amiloide en el cerebro puede producir deterioro cognitivo y funcional. Un deterioro que se relacionan con el alzhéimer.
Esta nueva medicación, como han confirmado los estudios realizados al respecto, puede ayudar a eliminar la acumulación excesiva de placas de amiloide. Reduce, así, la progresión del deterioro relacionado con la capacidad que tienen las personas para procesar nueva información, recordar fechas importantes, planificar y organizarse, preparar comidas, usar electrodomésticos, gestionar finanzas o incluso para quedarse solas.
Pruebas superadas
Para llegar a la aprobación de donanemab han sido necesarias diferentes pruebas científicas, enmarcadas en el estudio Trailblazer-Alz 2. En su tercera fase, participantes que se encontraban en estadios iniciales de la enfermedad, mostraron los mejores resultados utilizando esta medicación. El análisis, que se prolongó durante año y medio, se dividió en dos grupos de personas con la enfermedad en estadios menos avanzados, y con población general que mostraba altos niveles de la proteína tau. Tras los 18 meses de análisis se demostró que, en ambos grupos de participantes, se redujo de forma muy significativa el deterioro cognitivo.
Concretamente, en los participantes con la enfermedad ese deterioro se redujo en un 35%. En el grupo de población general, ese deterioro se redujo en un 22%. Y, en ambos grupos, el riesgo de progresión a la siguiente etapa clínica se redujo en un 39%.
En el grupo de población general del estudio, donanemab redujo las placas de amiloide en una media del 61% a los 6 meses, del 80% a los 12 meses y del 84% a los 18 meses.
Sin duda, este medicamento abre una puerta a la esperanza para poder ofrecer una cura a las personas con alzhéimer.