María José Sánchez Rubio ha tomado posesión como consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, tras recibir la cartera de su antecesora y nueva consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero.
La titular de Igualdad, Salud y Políticas Sociales ha destacado la trascendencia de estas políticas puesto que integran pilares básicos como son la salud y los servicios sociales. Para Sánchez Rubio, "las acciones en estas áreas repercuten directamente en el bienestar de los ciudadanos y resultan fundamentales para lograr una sociedad más igualitaria".
Nacida en 1954 en Casarabonela (Málaga), Sánchez Rubio es licenciada en Psicología y diplomada en Trabajo Social y Gerontología. Es funcionaria de carrera desde 1978 y pertenece al Cuerpo de Administradores Generales de la Junta. Desde abril de 2010 desempeñaba el cargo de delegada del Gobierno de la Junta en Granada.
A lo largo de su trayectoria política, la nueva consejera ha sido delegada de Asuntos Sociales en Granada (1997-2003), concejala en el ayuntamiento de Granada (2003-2004) y parlamentaria en el Congreso de los Diputados (2004-2010). Asimismo, fue portavoz de la Comisión de las Políticas Integrales para la discapacidad y portavoz adjunta de la Comisión de seguimiento y Evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo.
La nueva consejera de Andalucía comienza una ronda de reuniones con el sector de la dependencia
La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha iniciado una ronda de reuniones con representantes de entidades del sector de atención a la dependencia para abordar la situación actual y crear alianzas para afrontar el difícil momento que atraviesa el Sistema de Dependencia. En concreto, el primer encuentro se ha centrado en el ámbito residencial y a él han acudido los responsables de la Federación Andaluza de Atención a la Dependencia (FAAD), de LARES-Andalucía y de las cooperativas de economía social (Faecta).
Sánchez Rubio quiere mantener un diálogo fluido y leal con las entidades que trabajan en el sector de la dependencia, con el objetivo de encontrar fórmulas para afrontar la situación en la que se encuentran las empresas prestadoras de los distintos servicios.
En esta primera reunión con el sector residencial se ha acordado la creación de un grupo de trabajo específico que analizará la situación actual y buscará soluciones para garantizar la viabilidad de los centros y de la atención a las personas en situación de dependencia.