El Consell destinará 57,1 millones de euros para eliminar el copago en centros de día y para aumentar el "dinero de bolsillo" en centros residenciales, según figura en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 2016, que ha aprobado el Pleno del Consell. La vicepresidenta y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha explicado que hasta este momento se diferenciaba entre "copago de diversidad funcional y copago de mayores, de modo que ahora vamos a dividir el copago en centros diurnos y el copago en centros residenciales, que incluyen la noche".
"Nuestra idea es favorecer la autonomía personal, de modo que la residencia sea una última opción cuando ya no se puede otra cosa, porque mantener a las personas en su entorno afectivo y conocido da mayor autonomía personal y mayor bienestar", ha hecho hincapié Oltra.
A este respecto, Oltra ha insistido en que las medidas que se incluyen en la Ley de Acompañamiento "... ponen la autonomía personal y el bienestar de la persona en el centro de la política de la Consejería de Igualdad y Políticas Inclusivas".
"Creemos que con este cambio normativo que traducimos en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos de 2016 hemos encontrado un equilibrio para dar un buen servicio y ayudar a la gente que ha tenido que abandonar los servicios ", ha añadido.
De este modo, Oltra ha anunciado que "se elimina completamente el copago para personas con diversidad funcional y mayores en centros de atención diurna. Esto permite primero que se promocionen los recursos asistenciales diurnos, que se mantenga la gente en sus círculos afectivos y que no esté como está ahora, ahogada".
Por lo que respecta a los centros asistenciales, se deroga parcialmente el copago para personas con discapacidad funcional y mayores. Así, lo que se denomina "dinero de bolsillo", es decir, la parte de la pensión que no se toca, pasa de 219,66 al mes a 345,80 euros en el caso de personas con diversidad funcional. Es decir, al 65 % del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM). En el caso de los mayores, de 175,73 a 219,66 euros. Es decir, el 41,25 % del IPREM.
Además, se respetan las pagas extraordinarias, de manera que los usuarios dispondrán de la paga entera. No se tendrán en cuenta las extraordinarias a la hora de hacer un cómputo de la capacidad económica de los usuarios.
Finalmente, se mejora la prestación económica en materia de dependencia de personas cuidadoras no profesionales, lo que tendrá un coste de 23,84 millones de euros anuales. Esta medida beneficiará a casi 15.000 personas que, en la actualidad, perciben una prestación de dependencia por debajo de las cuantías asignadas.