La Comunidad tiene previsto incrementar en un 32 % el número de usuarios de la Oficina de Vida Independiente (OVI), un servicio de la Consejería de Políticas Sociales y Familia que proporciona apoyos a personas con discapacidad física y alto grado de dependencia, para que lleven a cabo su proyecto de vida.

El Ejecutivo regional destinará 3.293.816 euros para garantizar este servicio desde el 1 de agosto de 2015 hasta el 31 de julio de 2017. Actualmente, participan en este programa 62 personas y se espera llegar a 82. Asimismo, también está previsto que se aumenten las horas anuales de asistencia personal, que pasarán de 137.000 a 160.000, lo que supone un crecimiento del 16,79 %.

La OVI, servicio pionero en España que se creó en 2006, presta información, atención, apoyo y formación para fomentar el mayor grado de autonomía personal de sus participantes y tomar decisiones personales de forma libre e independiente. Además, ofrece jornadas de asesoramiento a Administraciones y asociaciones. El servicio que se presta está en función de las necesidades de cada usuario y se plasma en su Programa Individual de Vida Independiente (PIVI). Los 62 usuarios del programa reciben actualmente una media de siete horas diarias de atención.

Desde que se creó la Oficina de Vida Independiente, primera de este tipo en España, se han interesado numerosas personas, entidades y organismos por conocer su funcionamiento, su filosofía y la formación que imparte. Además, ha ganado premios y reconocimientos, y ha servido de referente para que personas con discapacidad física puedan desarrollar el proyecto de vida que quieren, estudiando, trabajando y, en definitiva, cumpliendo las aspiraciones en igualdad de condiciones que cualquier ciudadano.

Las personas que participan en el programa de la Oficina de Vida Independiente, además del servicio personalizado de asistencia personal, reciben servicios adicionales como orientación y asesoramiento en materia de empleo, accesibilidad y productos de apoyo y acceso a vivienda.

Se imparte formación tanto a participantes como a asistentes personales y familiares y todos los usuarios del programa participan conjuntamente en actividades comunitarias. Los usuarios tienen una vida activa e integrada plenamente en la sociedad durante los 365 días del año. En la actualidad están participando en el programa 62 personas (33 hombres y 29 mujeres). De ellas, 26 trabajan, 28 estudian y 8 estudian y trabajan.