Personas mayores en la Comunidad Valenciana 

La vicepresidenta y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas de la Comunidad Valenciana, Mónica Oltra, destacó "el reto de abordar un cambio de modelo residencial", en el que el único interés y el centro de la gestión de los recursos públicos sea "una atención de calidad y la dedicación a los residentes", con el objetivo de "humanizar los centros residenciales para personas mayores y que se parezcan cada vez más a un hogar".

Este nuevo modelo residencial puesto en marcha por la Conselleria de Igualdad y diseñado con la colaboración entre Administración, entidades y empresas del sector, está haciendo realidad "una construcción social de la red de recursos adaptados a las nuevas necesidades asistenciales de una población que aumenta cada año su esperanza de vida y requiere una atención mejor, más profesional y más individualizada", indicó Oltra.

La vicepresidenta, acompañada por la directora general de Atención Primaria y Autonomía Personal, Mercé Martínez, visitó la residencia y centro de día para personas mayores dependientes Velluters'de València, donde explico que se trata de "un claro ejemplo" de la implantación de un modelo residencial "en el que no solo se tienen en cuenta las necesidades del usuario y la calidad del servicio, sino también que los profesionales cuenten con unas condiciones laborales dignas".

Se trata, añadió, de "un modelo residencial de futuro" que dé respuesta a las necesidades de la sociedad actual y que constituya un espacio también de riqueza y de creación de empleo.
 
Concierto social

Siguiendo con el proceso de cambiar ese sistema, Oltra se ha referido al concierto social con centros residenciales y de día para personas mayores gestionados por entidades como "un paso más en la implantación de un modelo residencial centrado en la persona".

De esta manera, a principios de este mes se ha formalizado el concierto social de 2.087 plazas con 40 entidades del sector de personas mayores, 1.497 residenciales y 590 en centros de día, que aplicarán este nuevo modelo que mejora la ratio española de profesionales, pasando de 2 auxiliares para cada 9 personas con un grado 3 de dependencia a 2 auxiliares por cada 7, y que ha sido posible gracias al presupuesto que desde Igualdad y Políticas Inclusivas se ha destinado y que alcanza los 77,2 millones de euros para el periodo 2019-2020.

La puesta en marcha del concierto social en el sector de personas mayores implica un doble beneficio ya que, por un lado, facilitará a los centros recibir los recursos económicos en tiempo y forma, lo que afecta positivamente también a los profesionales de los mismos, y, por otro lado, implica la puesta en marcha de un modelo de atención residencial que promueve la defensa de los derechos de las personas en situación de dependencia.

Esto significa, explicó la vicepresidenta, que el concierto "dará una mayor estabilidad a los puestos de trabajo". Se estima que pueda afectar positivamente a alrededor de 1.500 profesionales de centros de personas mayores en toda la Comunidad Valenciana.