Las personas con discapacidad necesitan para realizar las distintas actividades de la vida diaria una serie de apoyos que van más allá de la accesibilidad de los entornos. El 8,5% de la población total española tiene algún tipo de discapacidad (3,85 millones). Del total de personas con discapacidad de seis o más años, el 74 % (2,85 millones) tiene dificultades para realizar las Actividades Básicas de la Vida Diaria (ABVD). Los problemas principales de las personas con discapacidad son de movilidad (67,2%), de dificultades en la vida doméstica (55,3%) y de dificultades para el autocuidado (48,4%). La mitad de ellas no pueden realizar alguna de estas actividades si no reciben ayudas.
Desde las organizaciones representativas de las personas con gran discapacidad física, especialmente lesionados medulares, (PREDIF, ASPAYM – Madrid y la Fundación del Lesionado Medular), se han identificado tres situaciones en las que las personas con discapacidad necesitan más apoyos para tener una vida más normalizada e independiente:
- La primera, con la lesión sobrevenida una vez que se les ha dado la alta médica por la sanidad pública cuando tienen que volver a su casa, retomar sus labores cotidianas e integrarse en su núcleo familiar y en su ámbito social.
- La segunda, cuando la lesión medular produce un nivel de dependencia en la persona que no le permite a corto y medio plazo vivir en su casa, incorporarse al trabajo o a los estudios, y necesita una asistencia más especializada para la vida cotidiana.
- La tercera, cuando la persona se ha adaptado a su nueva situación, está integrada en su núcleo familiar y ámbito social, y además tiene un plan de vida personal, profesional o de formación para el que necesita una asistencia personalizada, que en la mayoría de los casos se resolvería con “un apoyo humano”.
Para solventar cada una de estas situaciones las organizaciones antes mencionadas han creado tres modelos de apoyo para la vida independiente: el Centro de Servicios Múltiples para lesionados medulares, la Residencia del Lesionado Medular y la Oficina de Vida Independiente. Los dos primeros recursos son gestionados por la Fundación del Lesionado Medular y el tercero por ASPAYM-Madrid, todos están situados en un mismo recinto cuya parcela fue cedida por el Ayuntamiento de Madrid.
El Centro de Servicios Múltiples, es un centro concertado por la Consejería de asuntos sociales de la Comunidad de Madrid, alberga los servicios de rehabilitación funcional, de atención médica, psicológica y social especializada que corresponden al Centro de Rehabilitación, además de los servicios propios del Centro de día. El objetivo principal del servicio de rehabilitación integral es conseguir mantener un equilibrio de la salud del lesionado medular desde el punto de vista biológico, psicológico y social, manteniendo en todo caso el mayor nivel de independencia. En el año 2010, un total de 306 personas han utilizado los servicios prestados por el Centro de Rehabilitación.
El Centro de día, no es un centro de destino, sino de recursos, del que además, se benefician todos los usuarios del Centro de Rehabilitación y de la Residencia. En él se realizan actividades complementarias a la rehabilitación funcional, dirigidas a la inserción social plena en el entorno habitual del usuario, entre éstas destacamos, el taller de expresiones plásticas y manualidades, el taller de informática e Internet, el taller de radio, el taller de audiovisuales y distintas actividades deportivas y culturales.
La Residencia del Lesionado Medular se proyecta para personas con lesión medular que requieren viviendas adaptadas, cuidados personales y atención especializada las 24 horas del día, con el objetivo de facilitarles una vida autónoma acorde a sus capacidades intelectuales y a las limitaciones derivadas de la lesión. El edificio tiene una capacidad para albergar a 74 residentes, 59 plazas han sido concertadas por la Consejería de Familia y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid para lesionados medulares entre los 18 y 65 años. El edificio es 100% accesible y dispone de habitaciones adaptadas para Personas de Movilidad Reducida, con funciones domóticas para el control y la automatización de entornos. El programa residencial comprende actividades de rehabilitación, terapia ocupacional, formación, ocio y tiempo libre, talleres y desarrollo de la vida comunitaria, además de los servicios médicos y de cuidado personal.
Los residentes presentan un amplio abanico de situaciones personales, desde personas que trabajan o estudian hasta otras que por cuestiones de salud deben permanecer encamadas y, en ocasiones con atención permanente. La filosofía de la Residencia se define como un régimen totalmente abierto, con libertad plena de entrada y salida a su criterio.
La Oficina de Vida Independiente (OVI) se crea en 2006 y fundamenta en la Filosofía Mundial de Vida Independiente. Es gestionada por ASPAYM-Madrid y financiada plenamente por la Consejería de Familia y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid. Ofrece los servicios de “Asistencia Personal” (AP) a 28 mujeres y 35 hombres con discapacidad física.
Tanto el proyecto piloto (2006-2008) como el programa actual (2009-2011) se enmarcan dentro del Art. 19. "Derecho a vivir en forma independiente y a ser incluido/a en la comunidad", de la Convención de Derechos Humanos de las Personas con discapacidad (ONU, diciembre de 2006).
El objetivo prioritario del programa, es ofrecer la oportunidad de que todas las personas con discapacidad, en este caso física, que participan en el mismo, adquieran destrezas suficientes y necesarias para "tomar las riendas" de sus propias vidas, a través de los apoyos humanos que facilita este programa (esto es, las y los Asistentes Personales) y, desarrollar sus respectivos proyectos de vida personales, educativos, lúdicos, sociales, culturales y laborales.
El/la Asistente Personal "no necesita", obligadamente, tener una formación específica determinada (su formación, está en función de las tareas que deba desempeñar, las cuales, pueden ser: acompañamiento en el trabajo, estudio, vacaciones, viajes..., conducción vehículo particular, tareas domésticas, aseo e higiene personal...). Los servicios de asistencia personal (SAP) se conceden como máximo 16 hrs/día, 365 días al año. Una persona puede tener varios asistentes personales para cubrir las 16 hrs/día.
Los tres modelos de apoyo antes expuestos, favorecen la autonomía, independencia y participación social de las personas con grandes discapacidades físicas, y son extrapolables al resto de discapacidades.